A lo largo de la batalla de Kurukshetra, los Pandavas y los Kauravas tuvieron la regla de que sólo lucharían durante el día. Desgraciadamente, una noche los Kauravas rompieron esta regla. Tras la muerte de su padre Drona, Ashwatthwama entró de noche en la tienda de los Pandavas y mató a los cinco hijos de Draupadi.
Cuando Draupadi descubrió que sus cinco hijos habían sido asesinados, lloró amargamente. Ella le dijo a Bhima: “No voy a comer más hasta que mates a Ashwatthwama y me traigas su corona. Si no puedes hacerlo, moriré de hambre.”
Bhima corrió a matar a Ashwatthwama, con Yudhishthira y Arjuna siguiéndolo de cerca. Oyeron que Ashwatthwama se escondía en las orillas del Ganges, pretendiendo meditar entre los sabios de allí. Se había disfrazado de sabio y sentado cerca de Vyasa.
Con gran dificultad, Bhima, Arjuna y Yudhishthira lo encontraron. Al acercarse a él, Ashwatthwama sacó su flecha, la Brahmashira. Arjuna tenía también esta misma flecha. Antes de que pudieran enfrentarse con estas poderosas flechas, Vyasa y el otro gran sabio se incorporaron y dijeron: “¡Alto! ¡Alto! ¡Retirad esas flechas! ¡De lo contrario miles de personas morirán! Debéis tener alguna compasión por los seres humanos inocentes.”
Arjuna dijo: “Estoy dispuesto a retirarla. No quiero matar a personas inocentes.”
Ashwatthwama dijo: “Yo también la retiraré.”
Ahora bien, Arjuna era capaz de retirar su flecha debido a su espiritualidad. Había practicado espiritualidad durante muchos años y había llegado a ser bueno en cientos de maneras. Pero Ashwatthwama no pudo retirar su flecha y mató al nieto de Arjuna. Todos lloraron. Estaban en un mar de lágrimas. Pero Krishna sonrió y revivió al niño.
Bhima no había olvidado la petición de Draupadi, y dijo: “Tú eres el perdedor. Arjuna te derrotó al retirar su flecha. Ahora estás a nuestra merced. Danos tu corona o te mataremos aquí ahora.”
¿Qué podía hacer Ashwatthwama? Entregó su corona, y Bhima se la llevó a Draupadi.
La pena de Draupadi disminuyó un poco cuando vio que el orgullo y la gloria de Ashwatthwama habían caído. Colocó la corona sobre la cabeza de Yudhishthira diciendo: “Tú la mereces. Tú eres el líder de los Pandavas. Si veo en ti esta corona seré feliz porque lo hemos conquistado y él se ha rendido a nosotros.”
Yudhishthira dijo: “Si te hace feliz, me la pondré. Pero es doloroso para mí llevar esta corona porque está envilecida. Él mató cruelmente a nuestros hijos.”
Draupadi dijo: “Tienes razón. Tienes razón. Ahora que Bhima nos ha traído la corona, deshagámonos de ella. No la necesitamos. Su orgullo está a nuestros pies. Tiremos la corona.”